Hace poco vi una muy interesante película francesa llamada "les chanson d'amour" y simplemente me encanto, primero porque es una comedia musical, osea se entrelazan diálogos con canciones, sin caer en lo inverosímil, además su trama, algo extraña pero muy buena, me atrapo desde un comienzo, un periodista, Ismael (Louis Garrel) y su novia, Julie ( Ludivine Sagnier). Llevan un tiempo juntos pero han decido a agregar a alguien más a su relación, Alice (Clotilde Hesme). Para los tres resulta algo extraño, pero lo llevan de la mejor manera que pueden. Algo cándidos, duermen juntos y apenas discuten.El escenario se perturba cuando Julie fallece repentinamente por una embolia. La familia de Julie siente la carencia. Su hermana mayor, Jeanne (Chiara Mastroianni), trata de hacerse cargo de ello. Y de Ismael. Alice, quien además es su compañera de trabajo, empieza a salir con un sujeto. Y este sujeto tiene un hermano que va en el colegio, Erwann (Gregoire Leprince-Ringuet). Por accidente Erwann e Ismael terminan conociéndose. Por accidente, el estudiante parece ser un único camino de redención para Ismael.
Y porque me gusto tanto esta película, mostrada en cannes 2007, porque muestra París, París con todos los códigos visuales impuestos por las películas parisinas. muestra la ciudad que se perpetúa a sí misma en esa perfección nostálgica, bella, invadida de ventanas con postigos y edificios grises, el romanticismo, los árboles alineados en perspectivas... Agregar ahora el invierno. Todo luce aún más gris y deslavado. Los habitantes de la ciudad envueltos en abrigos, los días se hacen cortos y escasos de luz, osea como conocí París...frío y gris ... con ese halo de romanticismo y nostalgia.